Los 4 síntomas motores clásicos, que padecen las personas afectadas por la Enfermedad de Parkinson, son:
- Ausencia o lentitud de movimientos (acinesia y bradicinesia).
- Temblores en reposo, que al inicio suelen aparecer en un solo lado del cuerpo
- Rigidez, que consiste en un estado involuntario de tensión muscular y, por tanto, de resistencia al movimiento
- Inestabilidad postural o los trastornos de la marcha, que producen caídas, alteraciones del equilibrio, bloqueos y movimientos irregulares (1)
Además, existen otros signos y síntomas de la enfermedad llamados secundarios no relacionados con trastornos del movimiento. Aparecen al alterarse diversas neuronas y neurotransmisores implicados en la enfermedad (2,3) y afectan a la calidad de vida de la persona con párkinson. De entre estos síntomas destacan la fatiga, disfunciones urinarias, acumulación excesiva de saliva (sialorrea), dolor, problemas cognitivos y trastornos del sueño (4,5).
Síntomas motores
Clásicos o primarios
- Acinesia/Bradicinesia (ausencia/lentitud de movimientos)
- Temblores en reposo
- Rigidez muscular (estado involuntario de tensión muscular y resistencia al movimiento)
Inestabilidad postural/Trastornos de la marcha
Secundarios
- Visión borrosa
- Limitación para mirar hacia arriba
- Bradicinesia facial (descenso del parpadeo y pérdida de expresión)
- Distonía (contracciones musculares involuntarias y sostenidas)
- Disfagia (incapacidad o dificultad para deglutir/tragar) – etapas más avanzadas
- Disartria (dificultad para hablar) – etapas más avanzadas
- Discinesias (movimientos involuntarios, bruscos, rápidos e irregulares) – etapas más avanzadas
Síntomas no motores
Aunque menos conocidos, son parte importante de la enfermedad y pueden llegar a afectar mucho en el día a día
Neuropsiquiátricos
- Trastornos afectivos (depresión, desgana, ansiedad)
- Demencia (pérdida de las capacidades cognitivas debido a un deterioro del razonamiento, la memoria y la concentración que impide realizar actividades de la vida diaria)
- Alucinaciones
- Trastornos de control de los impulsos (dificultad para resistir la tentación de llevar a cabo un acto perjudicial para la propia persona o para los demás: hipersexualidad, ludopatía, compulsión por comer, comprar y consumir fármacos, así como el punding, un comportamiento estereotipado que comprende rituales motores automáticos sin finalidad
Trastornos del sueño
- Insomnio (dificultad para conciliar el sueño, sueño fragmentado o despertar precoz)
- Somnolencia diurna (sensación de cansancio a pesar de haber dormido muchas horas)
- Terrores nocturnos (sensación de miedo exagerada durante el sueño. Se diferencian de las pesadillas en la incapacidad de recuperar completamente la consciencia)
- Pesadillas
Sensoriales
- Hiposmia/Anosmia (disminución/pérdida total del olfato)
- Alteraciones de la visión (dificultad para diferenciar colores, sensibilidad a la luz y los contrastes, funcional lagrimal anómala)
- Hormigueo o entumecimiento
- Dolor (40-85% de los pacientes)
Disfunción autónoma (afectan al Sistema Nervioso Autónomo)
Urogenitales:
- Dificultad para orinar, aumento de la frecuencia, incontinencia, vacilación
- Disfunción sexual: pérdida de la libido e impotencia
Gastrointestinales:
- Sialorrea (acumulación excesiva de saliva)
- Estreñimiento
- Náuseas y vómitos
Otros:
- Hipotensión ortostática (mareos provocados por un cambio brusco en la postura, por ejemplo, al levantarse)
- Sudoración excesiva
- Dolor o fatiga